La Residencia Otxartaga inicia el año disfrutando de numerosas actividades

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Los mayores continúan con sus actividades en la Residencia Otxartaga

Tras celebrar San Blas y Santa Águeda, las personas residentes se preparan para gozar con los carnavales y seguir compartiendo tiempo con los jóvenes a través de diversos talleres

La Residencia Otxartaga inicia el año disfrutando de numerosas actividades

En la Residencia Otxartaga siguen trabajando para poder llevar a cabo la infinidad de actividades que brinda el inicio del año. 

Comenzaron celebrando San Blas. Lucieron con ilusión sus cordones previamente bendecidos para luego proceder a su quema, poniendo toda su fe en pensar que van a proteger y preservar su salud este 2025. En Otxartaga dan una gran importancia a las creencias de sus mayores e intentan preservar en la medida de lo posible las tradiciones que llevaban a cabo en etapas pasadas de su vida. El cordón de San Blas es un buen ejemplo de ello.

Este mes también tuvo lugar la tradicional festividad de Santa Águeda. Residentes de las diferentes plantas de la casa practicaron la canción ‘Agate Deuna’, acompañándola del compás de las ‘makilak’ que improvisaron para cantar la canción todos juntos el 5 de febrero. Y no lo hicieron sólo con los residentes, sino con los queridos visitantes del Colegio Otxartaga y de la Ikastola San Felix, que se sumaron a la celebración cantando juntos.

No es la única actividad intergeneracional de la que gozar este mes, ya que disfrutan de la compañía de los más jóvenes del pueblo casi semanalmente. Y es que los viernes se juntan con el alumnado de la Ikastola para desempeñar todos juntos actividades como talleres de cocina, bingos, etc. 

Superhéroes

Se aproximan además los carnavales, que este año se celebrarán a principios de marzo. Este año se van a convertir más que nunca en ‘Superhéroes’ y ‘Superheroínas’. Los talleres de laborterapia ya están en marcha para elaborar los disfraces que lucirán tanto las personas trabajadoras como residentes.

Y es que, aunque en ocasiones se considera a los mayores un colectivo vulnerable, no hay que olvidar que se trata de personas de quienes todavía hay mucho que aprender. Verdaderos superhéroes y superheroínas que, a día de hoy, tras un sinfín de vivencias (algunas más dulces que otras), son sabios conocedores de muchas de las lecciones que proporciona la vida. Se trata, por tanto, de un disfraz de lo más acertado.

En marzo también habrá una cita muy especial con los jóvenes del Hogar Elizalde. Juntos prepararán la merienda en un taller de cocina del que acabarán saliendo ‘con las botas puestas’. 

“Sigue siendo una alegría ver la ilusión de nuestros mayores cuando nos preguntan ‘¿Cuándo vienen los niños?’ o ‘¿De qué color va a ser la capa del disfraz?’ Por ellos seguimos llenando la casa de vida siempre que tenemos ocasión de hacerlo, y así seguiremos”, señalan desde la Residencia Otxartaga.

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